Día Internacional de la Caridad: el trabajo desinteresado de los futbolistas fuera del campo

• El 5 de septiembre es el día de Internacional de la Caridad de las Naciones Unidas

• Futbolistas de todo el mundo han mostrado actos desinteresados de bondad
   
• FIFPRO presenta a seis defensores de la comunidad que marcan la diferencia con su trabajo benéfico

El 5 de septiembre marca el Día Internacional de la Caridad de las Naciones Unidas, que celebra el voluntariado y la filantropía. 

Fuera del campo de juego, muchos futbolistas de todo el mundo han mostrado actos desinteresados de caridad que ayudan a contribuir a una sociedad más integradora y resiliente. 

Presentamos a seis futbolistas que han compartido sus obras benéficas con FIFPRO: desde favorecer a los jóvenes en situación desfavorecida mediante fundaciones, a incluir cláusulas de beneficencia en su contrato para ayudar a los menos afortunados.  

Sung-yueng Ki

El excapitán de la República de Corea, Sung-yueng Ki, ganó el Premio FIFPRO al Impacto del Jugador 2022 por su trabajo benéfico con World Vision: entidad benéfica con la que lleva trabajando cerca de 15 años, ayudando a personas desfavorecidas de Asia y África.

El centrocampista del FC Seoul ha donado dinero para contribuir a la construcción de escuelas y centros médicos en África, además de cubrir los costes médicos de personas hospitalizadas en situación crítica. Recientemente, se embarcó en un nuevo proyecto de apoyo a 30 futbolistas juveniles de Corea, procedentes de entornos problemáticos.

"Tienen entre 10 y 18 años, y proceden de entornos desfavorecidos. Dono entre 4.000 y 5.000 dólares al mes para contribuir a apoyarles: eso contribuye a comprar alimentos, pagar alojamiento y equipamiento para el fútbol, y servirá para los próximos cinco años", afirma Ki.

"Si estos futbolistas consiguen un contrato profesional y terminan cosechando éxito en el fútbol, es maravilloso. Pero eso no es lo más importante: lo más importante es que tengan éxito como seres humanos; que tengan la motivación de ir en pos de sus sueños, que lo den todo para convertirse en mejores personas".

Santiago Mele

Desde 2020, el guardameta uruguayo Santiago Mele mantiene una cláusula en su contrato, vinculada a su rendimiento, lo que significa que cuanto más logra sobre el campo de juego, más ayuda a los menos afortunados.  

Mele comenzó su actividad benéfica con su club principal, el Plaza Colonia, después de volver de Turquía, donde la cláusula benéfica se accionó por cada penalti salvado; después, en el Union Santa Fe en calidad de préstamo, se realizó una donación por cada cinco partidos sin encajar gol. Ahora, cedido en calidad de préstamo al Atlético Junior, Mele ha alcanzado también un acuerdo verbal con el club, donde un miembro del ejecutivo debe realizar las obras benéficas junto a él. 
 
Gracias a su cláusula benéfica, Mele y algunos de sus compañeros del Union han donado balones y equipamiento profesional a Los Buhos, equipo que representa a la provincia en el campeonato argentino de fútbol para ciegos. 

"Fue un día muy emocionante, y pasé un momento increíble con ellos", afirma Mele. "Es un modo de salir de la burbuja del fútbol y de obtener una perspectiva sobre el hecho de que no importa cuánto te dediques a ser futbolista, ganar o perder no es lo más importante del mundo. Esta es una profesión muy competitiva, y puede llegar a ser muy egoísta. Ser de ayuda y estar en contacto con la realidad es gratificante de un modo diferente y más satisfactorio". 

Marshall Munetsi

El internacional de Zimbabue, Marshall Munetsi, dona el 10 por ciento de sus ingresos a su fundación, que contribuye a proporcionar formación a niños en situación desfavorecida de Zimbabue.  

Su club, el Stade de Reims, introdujo una cláusula en el contrato de Munetsi, por el que el equipo de la Ligue 1 donaría 100 euros por cada kilómetro que recorriera el jugador de 26 años durante un partido: cuanto más corra Munetsi sobre el campo de juego, más recauda para los niños en situación desfavorecida. El contrato estará en vigor hasta 2027. 

"En la actualidad, la Fundación Marshall Mujetsi apoya a unos 60 niños de Zimbabue, que de lo contrario no tendrían acceso a educación", afirma Munetsi. 

"El valor central de nuestra fundación es dar a tantos niños en situación desfavorecida como sea posible acceso a mejor formación y garantizar que los niños pequeños tengan libertad para tomar decisiones, no desde una posición de desesperación, sino de fortaleza". 

Redouan El Yaakoubi

El año pasado, Redouan El Yaakoubi recibió el Premio al Activismo del Jugador de FIFPRO por su trabajo de apoyo a niños que crecen en un entorno desfavorecido. 

Mediante su fundación, Durf te Dromen (Dare to Dream), el capitán del Excelsior de Rotterdam ayuda a más de 1.000 niños. El futbolista de 27 años ha creado un programa especial para ayudarles a desarrollarse social y emocionalmente, al mismo tiempo que ofreciéndoles tutoría extra. 

"Cuando tenía 16 años, comencé a realizar trabajo voluntario en mi vecindario, principalmente con jóvenes, y a recaudar fondos para la Cruz Roja o el Ejército de Salvación. Tras un par de años, consideré comenzar mi propia iniciativa. Quería hacer algo para todos esos niños que estaban experimentando lo mismo que había experimentado yo", afirma El Yaakoubi. 

"Quería ofrecerles una perspectiva diferente y deseaba mostrarles que, con el enfoque correcto, pueden desarrollar su talento y pueden graduarse".

Ayisat Yusuf-Aromire

Ayisat Yusuf-Aromire ganó el Premio de FIFPRO a la Voz del jugador, por empoderar a las jóvenes y las mujeres mediante su fundación.  

La exinternacional de Nigeria tuvo que superar grandes obstáculos antes de convertirse en futbolista profesional, por motivos de género. Desde que se retiró, ha participado en obras benéficas para mejorar la vida de las jóvenes y mujeres en África, proporcionándoles herramientas mediante el fútbol. 

"La fundación es un modo de promover la igualdad, la salud y de apoyar a las jóvenes a tener el derecho de jugar al fútbol", afirma Yusuf-Aromire. 

"Organizamos una conferencia para las futbolistas juveniles cada año. Invito a antiguas internacionales, de manera que las futbolistas puedan ver modelos de conducta. Contrato a abogados para que las jugadoras conozcan sus derechos. Hay activistas que vienen a hablar acerca del abuso sexual, la violencia y otras cuestiones importantes".

Distel Zola  

El exinternacional de la República Democrática del Congo, Distel Zola, se incorporó al programa World Food en mayo, para promover una mejor nutrición en el país. El futbolista de 34 años puso fin a su carrera futbolística para concentrarse en la Fundación Banazola, que inició con su mujer Lorraine Lemaire, para dar un mejor futuro a niños congoleños de entornos desfavorecidos.  

Mediante su fundación, la obra benéfica de Zola ve retribuir a comunidades en situación desfavorecida de Kinshasa: desde renovar escuelas a enseñar a los niños acerca de nutrición.  

"Todas las oportunidades que he tenido, las he tenido gracias al fútbol", afirma Zola. "Quiero que Banazola retribuya a mi comunidad y ofrezca oportunidades a los jóvenes, para darles las herramientas de desarrollo y mejorar sus vidas lo máximo posible".

"Quizá un día puedan ser una gran estrella, o una persona normal. No importa, con tal de que sean felices". 

En nuestra serie #CommunityChampion destacamos las actividades benéficas de los futbolistas que contribuyen a mejorar la vida de los demás. Descubra más AQUÍ. 

Desde el año 2008, FIFPRO ha rendido tributo a los futbolistas profesionales que han realizado una gran contribución a alguna obra benéfica, a través del Premio al Mérito.