- El Foro Europeo del Deporte ofrece una plataforma para el diálogo estructurado entre la Comisión Europea y las partes interesadas en el deporte
- Maheta Molango, miembro de la junta directiva de FIFPRO Europa, ofreció una perspectiva centrada en los futbolistas sobre el calendario de partidos internacionales masculinos y la peligrosa carga de trabajo, ya que la FIFA y la UEFA están añadiendo unilateralmente más competiciones y partidos.
- Voces de la UEFA, la Asociación Europea de Clubes y las Ligas Europeas también intervinieron en el panel para analizar el actual ecosistema del fútbol europeo.
La canibalización del calendario de partidos internacionales masculinos y la necesidad de que los futbolistas y las ligas influyan en las decisiones de los órganos rectores del fútbol se pusieron de manifiesto el miércoles en el Foro del Deporte de la UE celebrado en Lieja (Bélgica).
El Foro Europeo del Deporte ofrece una plataforma para el diálogo estructurado entre la Comisión Europea y las partes interesadas en el deporte. Su principal objetivo es hacer balance de los progresos realizados en la aplicación de la agenda para el deporte de la UE y recabar la opinión de las partes interesadas sobre las actividades actuales y las previstas para el futuro.
Maheta Molango, miembro de la junta directiva de FIFPRO Europa, aportó una voz centrada en los jugadores en el contexto de la carga de trabajo, el calendario de partidos, la liberación de jugadores y la gobernanza internacional.
Molango subrayó la necesidad de proteger el fútbol europeo de las decisiones unilaterales de la FIFA y la UEFA, y cómo el número cada vez mayor de partidos y competiciones internacionales está causando perjuicios económicos y físicos a las ligas nacionales y a los jugadores europeos.
"La realidad es que, ahora mismo, la actual estructura de gobierno es imperfecta; no tiene en cuenta a dos de las principales partes interesadas: los aficionados y los jugadores", afirmó Molango. "Tenemos una situación en la que las instituciones, que se supone que son los padres del fútbol y velan por el bien del juego, no lo están haciendo. Esto sucede por dos razones: una, porque se quiere apaciguar a ciertas partes interesadas; y dos, porque hay una lucha por las fechas disponibles".
"En el contexto del fútbol en Europa, nuestra preocupación es que, por desgracia, hemos intentado repetidamente que se nos escuche y a nadie le importa. Así que llega un momento en que si a nadie le importa, hay dos vías: la legal o la reglamentaria", añadió Molango.
En la mesa redonda participaron partes interesadas de todo el panorama futbolístico europeo:
- Alberto Colombo, secretario general adjunto de las Ligas Europeas
- Stuart Dykes, director de Asuntos Institucionales y de la UE de Football Supporters Europe
- Dennis Gudasic, cofundador de la Unión de Clubes Europeos
- Nadine Kessler , directora general de Fútbol Femenino de la UEFA
- Charlie Marshall, director general de la Asociación de Clubes Europeos
- Maheta Molango, miembro del Consejo de FIPRO Europa
Los sindicatos y las ligas subrayaron la necesidad de que la gobernanza del fútbol internacional sea más transparente, objetiva e integradora, para dar a todas las partes interesadas el derecho a contribuir a dar forma al Calendario Internacional de Partidos.
El secretario general adjunto de las Ligas Europeas, Alberto Colombo, subrayó la falta de consultas y de participación de las partes interesadas por parte de la FIFA en las recientes decisiones sobre el Calendario Internacional de Partidos, que tienen un fuerte impacto en el ecosistema del fútbol a nivel nacional, al tiempo que argumentó sobre el doble papel de los órganos de gobierno como reguladores y organizadores de competiciones.
¿Están anteponiendo la FIFA y la UEFA sus intereses al bienestar de los jugadores?
Una de las mayores amenazas para el fútbol nacional de los países europeos son las recientes decisiones tomadas por la FIFA y la UEFA en torno al Calendario Internacional de Partidos (IMC, por sus siglas en inglés) y las nuevas competiciones. Estas decisiones, tomadas unilateralmente sin ninguna consulta significativa ni criterios objetivos para el bienestar de los jugadores, socavan la sostenibilidad del fútbol en los países europeos y pretenden beneficiar sobre todo a sus propias prioridades.
Alexander Bielefeld, director de Política Global y Relaciones Estratégicas (Fútbol Masculino) de FIFPRO, destaca cómo la sentencia del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas sobre la Superliga ha subrayado la importancia de que las partes interesadas afectadas en Europa no queden excluidas de la toma de decisiones.
"Aunque la sentencia del TJCE se centraba en la Superliga, el fallo tiene una importancia más general; los principios establecidos en dicha sentencia exigen cambios en la estructura de gobierno que aumenten los controles y equilibrios, como dotar a las ligas nacionales y a los sindicatos de futbolistas de una participación más directa en la toma de decisiones".
"El sector del fútbol profesional en Europa está obligado por la legislación europea, incluidas las normas sobre derechos fundamentales, y espera que otros actores de la industria del fútbol profesional que pretendan operar en los mercados europeos respondan del mismo nivel de exigencia."