FIFPRO se siente profundamente decepcionada al conocer la decisión del TAS de revocar la inhabilitación de por vida del expresidente de la Federación Haitiana de Fútbol, Yves Jean-Bart, tras las numerosas acusaciones de graves abusos sexuales.
Desde el principio de este caso, FIFPRO ha tratado de apoyar a las futbolistas que denunciaron abusos. Sin embargo, el camino recorrido por jugadoras y denunciantes ha sido increíblemente precario y difícil. Este último acontecimiento plantea nuevas dudas sobre la capacidad del fútbol para ofrecer una reparación eficaz en caso de violaciones graves de los derechos humanos. Como la vista no era pública, esperaremos a conocer la sentencia completa del TAS y la decisión de la FIFA sobre si recurrir o no, antes de comentar en detalle.
Sin embargo, las futbolistas buscan, con razón, respuestas urgentes a las siguientes preguntas:
- A la luz de las amenazas graves, explícitas y ampliamente documentadas que han recibido las personas a las que se ha pedido que presten declaración, y de la incapacidad del TAS para ofrecer una protección básica del anonimato, como la distorsión de la voz, ¿cómo prevé poder obtener alguna vez pruebas adecuadas para castigar a presuntos autores poderosos?
- ¿Por qué ha optado el TAS por referirse a la contribución de FIFPRO como no "suficientemente probatoria" cuando nunca se encargó a FIFPRO ni se responsabilizó de reunir pruebas? La inusual referencia a FIFPRO y HRW en el comunicado de prensa del TAS plantea más preguntas que respuestas y, sin la publicación de la sentencia completa, FIFPRO no puede comprender los detalles de la evaluación del Tribunal.
- ¿Por qué decidió el TAS hacer pública la decisión el día antes de otra vista en un caso de abusos relacionado, en el que las víctimas y los denunciantes también han recibido numerosas amenazas, con lo que se corre el riesgo de que esos testigos se retiren del procedimiento?
La prioridad de FIFPRO sigue siendo la seguridad y el bienestar de los y las futbolistas y sólo haremos más comentarios una vez que hayamos visto la sentencia completa y estemos seguros de que dichos comentarios no perjudicarían ningún procedimiento posterior.
Mientras tanto, seguiremos abogando por que los órganos de justicia deportiva conozcan los casos de forma segura y eficaz, ya que el sistema actual es incapaz de ofrecer garantías suficientes para que futbolistas y denunciantes se presenten y participen en los procedimientos sin riesgo de represalias.
FIFPRO también seguirá colaborando con los esfuerzos de la FIFA para crear una entidad independiente para el deporte seguro (Safe Sport Entity), ya que este caso demuestra una vez más que los mecanismos existentes no son adecuados para su propósito. Las investigaciones y la resolución de los casos de abuso requieren un enfoque experto, matizado, informado sobre el trauma y centrado en el sobreviviente.
Sólo entonces se obtendrán con seguridad las pruebas necesarias, sin hacer recaer sobre las víctimas y los supervivientes la carga de pedir cuentas a los agresores. Si el fútbol quiere realmente cumplir con sus obligaciones de gobernanza y eliminar a los abusadores del deporte, muchas cosas deben cambiar y deben cambiar rápidamente.
