- Dos de cada tres futbolistas profesionales no saben qué harán cuando dejen de jugar
- La Universidad de Bruselas encuestó a 282 futbolistas de 33 países como parte de la campaña "Mind the Gap
- Jonas Baer-Hoffmann, de FIFPRO, afirma que los resultados son una "llamada de atención" al sector para que ayude a los jóvenes futbolistas
Un 67 por ciento de futbolistas profesionales no sabe con certeza qué hará cuando deje de jugar, según la encuesta de FIFPRO.
Mientras que el 49 por ciento manifestó tener “una idea” o “algunos intereses” que podría intentar seguir, un 18 por ciento afirmó no saber qué hará cuando llegue el momento de finalizar su carrera futbolística, según halló la encuesta. Únicamente el 33 por ciento afirmó tener “confianza” en lo relativo a su segunda carrera cuando dejara el juego.
Los hallazgos forman parte de la campaña “Mind the Gap”, que aspira a ayudar a los sindicatos de futbolistas a proporcionar apoyo para el desarrollo personal. La encuesta, llevada a cabo por investigadores de la Universidad de Bruselas, indagó entre 282 jugadores y jugadoras, en activo y retirados, repartidos en 33 países.
Un 70 por ciento de los jugadores que ha recibido ayuda con la planificación para una nueva carrera recibió ayuda de su sindicato, según halló la encuesta. Otras organizaciones que ayudaron en la preparación incluyeron clubes (21 por ciento), instituciones educativas (19 por ciento) y federaciones (7 por ciento).
“Este dato es una llamada de atención a la industria del fútbol”
— por Jonas Baer-Hoffmann, Secretario General de FIFPRO
El Secretario General de FIFPRO, Jonas Baer-Hoffmann, ha afirmado: “Este dato es una llamada de atención a la industria del fútbol, y muestra que debemos hacer más para dar asistencia a los jóvenes futbolistas (del fútbol masculino y femenino) a prepararse para el momento en que dejen de jugar.
“Realizan grandes sacrificios durante su infancia y los primeros años de su veintena para convertirse en futbolistas profesionales, y la industria debe hacer más por ayudarles a bregar con lo que llega después. Ello no solo abarca su futuro económico, sino también su bienestar y salud mental.”
En algunos países, como Australia, Dinamarca e Inglaterra, existen acuerdos colectivos entre los sindicatos de jugadores, las ligas y las federaciones, mediante los que un porcentaje de los ingresos por partido se destina a los sindicatos, a fines de apoyo y desarrollo del jugador.
“Muchos de nuestros sindicatos de futbolistas están realizando ya un fantástico trabajo en este ámbito, pero el desarrollo personal requiere muchos recursos y depende de las partes interesadas trabajar juntas y contribuir a ello.”
En los últimos dos años, la campaña “Mind the Gap”, cofinanciada por el programa Erasmus+ de la Unión Europea, ha asignado financiación al nombramiento de cinco nuevos gestores de desarrollo del jugador en los sindicatos de futbolistas de Chipre, Finlandia, Grecia, Irlanda y Suecia, para que asistan a los futbolistas en su vida fuera del campo de juego.
En la encuesta, el 34 por ciento de los jugadores retirados comenzó a prepararse para una nueva carrera de uno a tres años antes de dejar de jugar. El 19 por ciento comenzó a hacerlo al iniciar su carrera futbolística, y el 12 por ciento tras una lesión. Para el 46 por ciento, el final de sus carreras llegó de manera inesperada, por una lesión o alguna otra razón.
El apoyo proporcionado a los jugadores durante su carrera incluyó oportunidades de estudio (45 por ciento), asesoramiento individual (28 por ciento), talleres (24 por ciento) y confección de CV (18 por ciento).
Pero el 54 por ciento de los jugadores no recibió ninguna asistencia para la planificación de su segunda carrea, según concluyó la encuesta. De los que no recibieron ayuda, el 34 por ciento afirma que el apoyo no existía, el 18 por ciento afirmó que no sabía que podría tener esa ayuda, y el 14 por ciento simplemente “no quería pensar” en la vida después del fútbol.
Los jugadores retirados indicaron motivación insuficiente, falta de perspectiva a largo plazo y falta de recursos económicos como algunas de las barreras más importantes a la planificación. Los jugadores en activo informaron de limitaciones de tiempo y falta de apoyo, entre otros factores.