Los jugadores de las cuatro Divisiones nacionales quedan protegidos ante la contingencia de que un club vaya a la quiebra, mediante un fondo gestionado por su sindicato nacional, la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE).
Cuando Ernest Forgas jugaba para el Reus B, club de la provincia de Tarragona, en cuarta División, estuvo cuatro meses sin recibir su sueldo. Posteriormente, el club tuvo que ser intervenido, y debía a sus futbolistas la suma de 700.000 euros en salarios.
Los abogados de AFE visitaron al equipo, para tranquilizarles.
“Nos dijeron que debíamos esperar un poco, pero que el pago estaba 100% garantizado,” afirma Forgas.
Antes de cumplirse tres meses desde el final de la temporada, Forgas y sus compañeros de equipo recibieron una transferencia bancaria por la cantidad que se les debía, emitida desde el fondo. El Reus, que se fundó en 1909, posteriormente cerró sus puertas.