Helen Ward: "Debemos estar siempre preparados para el peor de los casos"

Helen, que juega para el Watford Women FC de tercera división, se dirigió a Twitter en enero después de que la FA cerrara los niveles tres a siete en el fútbol femenino debido a una segunda ola de coronavirus en el país. Las consecuencias de esta decisión han tenido un gran impacto en la vida personal y profesional de las jugadoras de ese nivel.

“Cuando llegó el anuncio en enero de que íbamos a vivir otro confinamiento, se volvió un poco abrumador. La idea de estar en casa todo el día, tratando de educar en casa a niños de tres y seis años, mientras intentaba mantenerme en forma a la vez era desalentadora”.

“La segunda vez fue particularmente difícil, porque el juego femenino solo se detuvo desde el nivel 3 e inferiores”. En el verano estábamos todos juntas en esto. Nadie estaba jugando al fútbol y era un poco novedoso, pero en el invierno se sentía de forma diferente, de forma más solitaria, y creo que probablemente fue lo más difícil de afrontar”.

“Mis compañeras del Watford estaban pasando por lo mismo, ya que ninguna de nosotras había tenido la oportunidad de entrenar y jugar juntas como equipo, pero no tenían las mismas preocupaciones sobre mantener la forma física antes de los partidos internacionales. Sin embargo, tenía que asegurarme de no quedarme atrás del nivel de mis compañeras de Gales, que han podido entrenar y jugar”.

“Cuando compartí mis miedos en Twitter estaba pasando por un momento sensible, pero recibí respuestas muy amables y mensajes alentadores que decían: ‘No dejes que esto pueda contigo’. Así que aquí estoy, parece que estamos saliendo de esto y sigo siendo futbolista”.

“Sin embargo, es abrumador cumplir 35 años, básicamente después de haber perdido un año de mi carrera, un tiempo que no puedo permitirme perder. Tendré suerte de haber llegado a 15 partidos en los últimos 12 meses y esa falta de consistencia trae sus propios problemas en lo que se refiere a las lesiones, lo cual es un gran riesgo en este momento de mi carrera”.

“Soy la jugadora de mayor edad tanto en mi club como en la selección internacional de Gales, pero no quiero que me juzguen o me definan por eso, todavía siento que me quedan algunos años al más alto nivel. Así que, en el futuro, tendré que centrarme en las ventajas de ser una jugadora experimentada frente a los inconvenientes físicos que conlleva”.

“Con todo esto en mente, voy a entrar en la temporada 2021/2022 con una perspectiva positiva, ya que las cosas ciertamente se ven un poco más optimistas que en esta misma época el año pasado. Hay cosas que deben abordarse para minimizar cualquier impacto negativo en el fútbol femenino en los próximos años”.