Sobre
Marco Carducci
Marco Carducci, portero del Cavalry FC en la Premier League canadiense, ha sustituido recientemente a Marcel de Jong como presidente del sindicato canadiense de futbolistas con solo 26 años.
Fui vicepresidente del sindicato canadiense de futbolistas desde que me eligieron en la primera reunión del comité de esta organización. Cuando Marcel de Jong renunció a su cargo como presidente, para mí fue una progresión natural asumir su papel.
Ha sido una transición bastante fluida hasta ahora. Trabajé muy de cerca con Marcel y estábamos bastante alineados con lo que veíamos para el futuro del sindicato, así que siento que estoy en un buen lugar para poder empezar.
Le estoy inmensamente agradecido. Fue un verdadero pionero para Canadá, tanto como jugador como presidente, y su dedicación y credibilidad fueron pilares básicos en los primeros días del sindicato. Pasamos de ser inexistentes a ser el sindicato de Canadá. Tener a alguien como él difundiendo el mensaje y reuniendo a los jugadores fue de un valor incalculable. Se arriesgó y dio el primer paso. Somos muy afortunados de contar con la base sólida que él y nuestro director ejecutivo Dan Kruk establecieron para poder seguir construyendo. Incluso tenerlo como modelo a seguir en esos primeros años fue importante para mí y voy a hacer todo lo posible para que él y su legado se sientan orgullosos.
Creo que el sindicato tiene una oportunidad especial para aumentar el apoyo a los jugadores junto con la creciente popularidad del deporte. Estamos entrando en nuestro quinto año en la Premier League canadiense, mientras que internacionalmente el equipo femenino se ha convertido recientemente en campeón olímpico liderado por la máxima goleadora del mundo. La profesionalidad del deporte está creciendo a un ritmo rápido y el sindicato se está desarrollando a su lado, lo que significa que podemos garantizar que nuestros jugadores y jugadoras reciben el apoyo adecuado en cada paso del camino.
Es maravilloso que los futbolistas tomen la decisión de ganarse la vida en Canadá y que ahora podamos ofrecer una infraestructura e incentivos no solo para animar al talento local a quedarse, sino para atraer a jugadores y jugadoras de todo el mundo. Es un momento emocionante para el fútbol canadiense y tengo la esperanza de que con el tiempo podemos igualar los logros de la MLS de los Estados Unidos.
Es un periodo crucial y esta progresión siempre va a venir con la política. Establecernos como una herramienta reconocida para los jugadores fue el primer paso, pero ahora estamos empezando a centrarnos en los derechos de negociación colectiva y a establecer nuestro lugar dentro del marco más amplio del fútbol.
No es trabajo de una sola persona. Podría ser presidente, pero nunca podría pensar en un logro del sindicato como mío propio, hay muchas partes involucradas y colaboraciones en cada tarea y decisión que llevamos a cabo. Me siento honrado de formar parte de todo esto.
Cuando me uní al sindicato en sus inicios, me apasionaba la perspectiva de representar a los jugadores y de contar con una organización que siempre nos respaldaría. Me uní a un grupo de personas que sentían exactamente lo mismo. En lo que sea que trabajemos, lo hacemos juntos. Lo hacemos por los futbolistas en Canadá, desde los grandes nombres hasta los equipos juveniles. Ese fue nuestro objetivo desde el principio y como presidente ayudo a asegurar que siga siendo así.
Queremos ser parte del crecimiento del fútbol, asegurando que el fútbol canadiense progrese de una manera que sea en el mejor interés de los jugadores y el deporte. El objetivo final es garantizar que se escuchen las voces de nuestros jugadores y que se satisfagan sus necesidades. Si puedo recordar mi tiempo como presidente habiéndome dado cuenta de eso hasta cierto punto, consideraré que nuestro trabajo ha sido un éxito.
Por supuesto, siempre estoy pensando en los siguientes grandes pasos a seguir. Pero es muy importante reconocer las pequeñas cosas como logros por derecho propio. Cada vez que un jugador viene a nosotros con un problema y somos capaces de ofrecer nuestra ayuda de alguna manera, es un recordatorio de que estamos haciendo algo bien. En un par de años nos hemos consolidado como alguien a quien recurrir, con un servicio que simplemente no existía antes.
Después de todo, primero soy futbolistay, sí, esto significa que tengo mis propias metas y aspiraciones individuales aparte de mi trabajo con el sindicato. Sin embargo, también significa que tengo experiencia de primera mano de lo que significa ser un jugador actual en la Premier League canadiense, y las personas que estoy tratando de ayudar son mis compañeros, colegas y compañeros de equipo.
Ser presidente de un sindicato no consiste en hacer las cosas a tu manera, sino en asegurarse de que todas las voces, tareas y personas estén trabajando hacia el mismo objetivo. Se trata de asegurarse de que los jugadores estén representados, de que la organización siga siendo identificable, accesible y efectiva. Creo que hemos hecho un buen trabajo hasta ahora, pero ahora es mi responsabilidad mantenernos en el camino correcto sin importar lo lejos que hayamos llegado.
