El antiguo jugador de la selección nacional, Kamoliddin Murzoev, y presidente del sindicato, ha hablado con FIFPRO acerca de los logros y grandes retos de la organización.
Murzoev es uno de los tres fundadores del UPFU, junto con el antiguo jugador Davron Shaimardanov y Ravshan Nikimbaev, Secretario General y Director de Relaciones Internacionales del sindicato, respectivamente.
Se conocen desde hace tiempo y, durante una de sus numerosas conversaciones, debatieron algunos de los problemas que afrontaban los futbolistas profesionales en su país. “Entonces comprendimos que debíamos establecer un sindicato para ayudar a los jugadores,” afirma Murzoev.
Su mayor prioridad es el impago, pues en muchas ocasiones no se respeta el contrato del jugador. Murzoev: “Cuando los futbolistas se aproximaban al final de su contrato, algunos clubes dejaban de pagarles hasta que renovaran el contrato. Si los jugadores decidían no renovarlo, entonces no recibían sus salarios pendientes.”
Murzoev, Nikimbayev y Shaymardanov recibieron inspiración tras una visita del presidente de FIFPRO Asia, Takuya Yamazaki, y su visita a la Asamblea General de FIFPRO Asia en 2018, en Corea del Sur. “Aquello cambió completamente nuestra mentalidad. FIFPRO concibió cosas que nunca habíamos considerado antes. Comenzamos a ver las cosas de un modo diferente. Comprendimos que podíamos cambiar muchas cosas que hasta entonces habíamos dado por hecho.”
En suma: alcanzaron una mayor comprensión de los derechos de los jugadores. “Por ejemplo, hemos comprendido que no es normal jugar un partido en Arabia Saudí en junio, durante las horas más calurosas del día, o que existe un protocolo de emergencia que permite a un doctor introducirse en el campo incluso cuando el partido no se ha detenido, o que los jugadores no tienen que pagar por el tratamiento impartido por el personal médico. Ese tipo de cosas.”
Los primeros cuatro años han sido fructíferos para UPFU, que cuenta ya con 500 miembros, incluyendo 400 hombres y 100 mujeres. “Los jugadores nos conocen. Davron y yo hemos sido también jugadores, y somos bien conocidos por los futbolistas y directivos de clubes de nuestro país; puedo decir que todos los jugadores tienen el número de teléfono de Davron, de Ravshan o el mío.
El sindicato ha firmado un Protocolo de Acuerdo y cooperación con la liga, y trabaja también en diversos acuerdos con la Federación de fútbol. Uno de los acuerdos de UPFU, firmado ya con la Federación de fútbol, regula la implementación de la aplicación Red Button, que permite a los jugadores denunciar el arreglo de partidos de manera anónima.
“El arreglo de partidos era un problema en nuestro país. Antes de que introdujéramos la aplicación a principios de este año, teníamos ya diversos jugadores que nos habían comentado incidentes acerca del arreglo de partidos. La Federación de fútbol comprendió que la aplicación Red Button podría ayudar en un país, con una amplitud de 1.000 kilómetros y una población de 30 millones, y con únicamente dos oficiales dedicados a cuestiones de integridad. Creemos que la aplicación Red Button puede ayudar a reducir los casos de arreglo de partidos.”
Desde la perspectiva jurídica, UPFU ha dado grandes pasos: existe un contrato para el jugador que es el estándar mínimo, ha expresado su parecer acerca del desarrollo del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores en el país, y se ha establecido un sistema de arbitraje.
“Hemos entablado más de cincuenta casos y nunca hemos perdido ninguno de ellos, incluyendo cinco casos de éxito en la Cámara de Resolución de Disputas de la FIFA. Esta reputación nos ha ayudado a ser reconocidos, pues los jugadores, los clubes y la liga observaron que siempre nos asistía la razón, y ello aceleró la decisión de la liga para firmar un protocolo de acuerdo con nosotros, lo que contribuyó a mejorar la relación con los clubes. Incluso un club contra el que una vez presentamos 15 casos, es ahora muy amistoso con nosotros.”
Con la Federación de fútbol, UPFU trata ahora de establecer una Cámara Nacional de Resolución de Disputas. Otros objetivos en la lista de cuestiones pendientes del sindicato incluyen organizar un convenio colectivo de trabajo para la selección nacional masculina, e incrementar su cifra de afiliados.
Murzoev ha destacado que el sindicato desea elevar el nivel de profesionalidad del fútbol uzbeko. “Junto con FIFPRO lanzamos un proyecto, ‘Seguridad y salud personal de los futbolistas’, que es muy importante para todas las partes interesadas. En base a los resultados de esta encuesta, hemos identificado diversos problemas clave; por ejemplo, que los jugadores no conocen la normativa contra el dopaje, lo cual tratamos de resolver en cooperación con la Federación de fútbol, la Liga y los clubes. Hasta el momento, nuestros diálogos han sido fructíferos.”
“También debemos mejorar las condiciones laborales de las jugadoras. Deseamos comenzar con las jugadoras de la selección nacional, para que puedan recibir una prima cada vez que sean convocadas en representación de nuestro país, ya que ahora mismo no reciben ninguna compensación por ello.”
Por último, pero no por ello menos importante, UPFU se enorgullece de haber introducido la votación para el World 11 en su país. “A los jugadores siempre les ha atraído ese evento, y ahora podemos decir que su voz en Uzbekistán significa algo en el mundo. "
