Futbolistas australianos introdujeron los Juegos Verdes para concientizar sobre la relación entre el cambio climático y el fútbol, reducir la contaminación por carbono, compensar las emisiones e introducir prácticas sostenibles en los clubes. Emma Ilijoski, defensa del Canberra United, fue una de las principales impulsoras de la iniciativa. Habla con FIFPRO sobre la campaña y su papel.
Por Emma Ilijoski
Todo empezó cuando asistí a una cumbre sobre el clima en la que, además de las partes interesadas, había atletas de otros deportes. Desde muy joven me ha apasionado el medio ambiente y ese día tuve la oportunidad de conocer a un montón de gente increíble. Me inspiró escuchar sus historias. Me comprometí a crear algo similar para las A-Leagues.
Tras la cumbre pregunté a Professional Footballers Australia si podíamos hacer algo. Se entusiasmaron y me animaron a continuar. La Asociación de Futbolistas Profesionales (PFA) fue la primera organización deportiva australiana en lograr la neutralidad de carbono y puso en marcha una iniciativa, Our Greener Pitch, para animar a los jugadores a actuar y mitigar los efectos del cambio climático.
El grupo de futbolistas de Our Greener Pitch está formado por unos 15 jugadores de las ligas masculina y femenina y por internacionales como Jackson Irvine, Aivi Luik y Alex Chidiak. Yo soy el principal punto de contacto entre ellos y la PFA.
Es estupendo escuchar las perspectivas e ideas de todos. Es muy especial poder colaborar con jugadores y jugadoras de equipos rivales por una causa que nos supera a todos.
Uno de nuestros primeros objetivos fue crear un partido verde, o una jornada verde, para concientizar sobre la relación entre el cambio climático y el fútbol a todos los implicados: los jugadores, los aficionados, los clubes, los niños. Organizamos nuestro primer partido verde en marzo, con el encuentro de la A-League femenina entre el Canberra United y el Wellington Phoenix.
Nos centramos en tres pilares. El primero era la ausencia de plástico: el gobierno nos proporcionó botellas reutilizables que repartimos entre el público y que nosotros mismos utilizamos. Muchos niños nos pidieron que les firmáramos sus botellas, lo cual estuvo muy bien porque eran el público principal al que nos dirigíamos. El segundo pilar era compensar la contaminación de carbono causada por el viaje del equipo visitante, que venía de Nueva Zelanda, y el tercero era simplemente concientizar.
El día del partido, la PFA publicó un informe que describía el impacto del cambio climático en las A-Leagues. En él se ilustra cómo ha sufrido el fútbol las recientes inundaciones, el calor y los incendios forestales. Aunque algunas partes son bastante chocantes y sorprendentes, el informe ayuda a iniciar una conversación.
La temporada pasada por ejemplo muchos partidos empezaban a las 14.00 o a las 15.00 porque hacía mucho calor, sobre todo en verano. Hacíamos dos pausas para beber en cada tiempo, lo que perturbaba el desarrollo del partido. Después de cada descanso parecía un partido diferente.
Sin embargo lo más alarmante fue que después de algunos partidos había chicas que iban al hospital por golpes de calor. Todas sentíamos los efectos después, con deshidratación y dolores de cabeza, pero el hecho de que una jugadora tuviera que ir al hospital era aterrador. Jugamos al fútbol por los aficionados pero al fin y al cabo se trata de nuestra salud.
Recuerdo mi debut con el Canberra en 2021: era el día más caluroso del año, 42 grados centígrados, y jugábamos a la una de la tarde. Sin duda el calor influyó. Es una anécdota que cuento porque esas experiencias personales compartidas hacen que las cosas sean más cercanas.
Tenemos una voz y una plataforma, y podemos cambiar las cosas. El fútbol ha sido capaz de abrir camino en muchos temas, ya sea la igualdad o el antirracismo. Puede que no obtengamos necesariamente una respuesta positiva al cien por cien, pero al fin y al cabo el cambio climático es algo que nos afecta a todos.
Estamos debatiendo cómo podemos cambiar la experiencia de los aficionados. ¿Cómo podemos animar a los aficionados a compartir el coche para ir a un partido o a utilizar el transporte público? ¿Podemos hacer que los días de partido no se usen plásticos? ¿Podemos animar a los aficionados a que lleven recipientes reutilizables y botellas de bebida a los partidos? ¿Podemos conseguir que el gobierno se involucre en la provisión de fuentes de agua para que los aficionados puedan llenar sus botellas? Me gustaría que las botellas de bebida de plástico dejaran de usarse y eso podría fomentarse si, para empezar, los y las futbolistas trajeran sus propias botellas de agua.
Además los clubes pueden aprovechar un sinfín de oportunidades. ¿Se fabrica el uniforme de forma sostenible? ¿Adónde van a parar las equipaciones de la temporada anterior? ¿Podrían funcionar las luces del estadio con energía solar?
Con los jugadores del Canberra United que forman parte de Our Greener Pitch, pusimos en marcha un proceso de reciclaje. En nuestra ciudad, puedes donar botellas de plástico y recibir 10 céntimos a cambio. Después del entrenamiento, en lugar de tirar las botellas a la papelera normal del vestuario, las depositamos en un contenedor de reciclaje que creamos.
Los Juegos Verdes iniciaron otra chispa en mí. Cuando estuve en la cumbre sobre el clima no sabía que esto podría ponerse en marcha. No sabía a cuánta gente le importaba hasta que empecé a hablar con ellos.
Me hizo mucha ilusión que tantos y tantas futbolistas estuvieran tan interesados. Verlo hecho realidad fue muy gratificante. Tanto yo como gran parte del personal de la PFA Australia y los jugadores implicados tuvimos que hacer frente a muchas barreras y obstáculos. Fue agradable superarlos y ver cómo los Juegos Verdes se hacían realidad.
Me siento orgulloso al recordarlo pero también siento que es una tarea inacabada. Creo que nunca estaré satisfecho porque es un gran reto y una gran oportunidad. ¿Cómo podemos hacernos más grandes y mejores? ¿Cuál es la próxima etapa?
He aprendido que no hace falta ser un experto en cambio climático. Yo sólo aconsejaría a todos los que duden en unirse que no tenemos que saberlo todo sobre el tema para que nos apasione. No somos los científicos. Hay muchas cosas importantes en este mundo sobre las que los deportistas pueden hablar. Animo a todos a que defiendan lo que les apasiona para fomentar un mundo más inclusivo y seguro porque, en última instancia, de eso se trata el fútbol.